lunes, 29 de noviembre de 2010

El birimbao y el malecón

Sole tararea al escuchar a Luna jugar sobre la cama, ella esta callada tocándose la barriga aun en pijama... Sole se enternece y escribe junto a su amada:

"Al diablo las canciones de amor" esta escrito en la entrada del colegio de mi hija, que ella estudie música desde pequeña me hace un hombre orgulloso pero aterrizado, es difícil criar a una niña en una tierra que no le dejo entender, debo solucionar la paradoja, cuando mi pequeña me avista en la reja se abalanza sobre mi, venir a buscarla es una de las tantas cosas que disfruto, mi oportunidad es ahora, la tarde de los viernes esta libre para ella, ¿seria cruel quitarle este día? ¿Puede mi hija entender mis acciones? , me vale, me arriesgare con todo, mi pequeña toma mi mano dando unos saltitos al caminar, "como estuvo la lección?" le pregunto al darle un caramelito, mi pequeña, lamiendo con gusto la golosina me respondió "la flauta y el violín los estoy mejorando" , ella saca el violín de su maleta y me interroga " te doy una sonata?" , mi alma se ilumina, yo detengo sus manos y poniendo todo en orden, tomo a mi pequeña sobre mi cabeza y le digo " el único concierto de este día te lo daré yo, me disculpo pero te robare la tarde" mi hija no dice mucho, solo extraña su hora de la merienda, no quiere ponerme triste pero ella adora comer bananos sobre la hamaca siendo dorada por el sol, mejor es así, e convencido a mi pequeña de que me acompañe a pasear, pasamos por la casa y la dejo arreglarse como le plazca, yo tomo mi trago que empecé esta mañana y al hombro cargo mi birimbao, cuando mi pequeña salga le daré la dirección, el malecón es un buen lugar, canoa al agua y mi pequeña va conmigo, la pongo cómoda dándole mis piernas para que se recueste, ella me da la espalda y la guío para que no se gire hacia mi, le toco todo mi amor en la canción del río y la luna, mi birimbao debe entrar esa cancioncita sobre su cabeza, amor por amor, cantar por gusto, cantar por vicio, escribir canciones por dicha, componer orquestas por no llorar, hija mía, espero que tus oídos nunca se apaguen, mi vida se completa si llegas a escribir una canción de amor, incluso si no es para mi


Luna toma la mano de Sole y con ternura lo ayuda a recorrer su vientre

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