Sole amanece con el deseo de ver a su amada, Luna esta en la casa ensimismada, Sole espera lo mejor y le escribe a su eterna novia:
Me duele la mañana, levantarme temprano es dulce pero
doloroso, la espalda es un fastidio si no cambio de rutina, María, construir tu
iglesia se está llevando lo mejor de mí, no me quejo contigo ya que a la larga
es inútil, soy un hombre que ha llegado a gustar de ti, tomate un tiempo para
descansar, descansar a la sombra ya que estas muy morena por el sol, morena
como una mora y como cuero de tambor, iré a cortar caña para ayudar en la
construcción, si tú tienes devoción yo tengo impulso, bajare a la laguna para
recolectar limo y frutas, no espero que me acompañes pero lo haces para
imitarme, no puedes llevar caña, las frutas se te caen y te asusta tocar el
agua, entre el cielo y yo, perseverancia soy, tu la devoción
Luna encuentra la nota y acompaña a su pareja en la cocina ayudándolo con los platos
